A los ojos de la mirada de Monica.
La delicada experiencia de mi alma es trascender tu suavidad hiriendo con la palabra al viento de la distancia con mi mas profunda ternura.
No puedo callar este cielo inmenso que derrama palabras como descienden los sueños bellos de un cielo de poesia a nuestra mente dormida en el dia a dia.
Tu, para mi supones esa lagrima que cuida la puerta de mi mirada para enjugar de ilusion cualquier instante que se convierte en bendicion.
Si el infinito es posible, el infinito es en ti.
Lo se al hablarte.
Lo se al mirarte.
Lo se al rozarte.
Lo se al respirarte.
Y, esa emocion que tapa la razon de dulce embeleso tapa el paisaje de lo que se considera real.
Y aun asi, vuelvo a Madrid, cargado de ti, de palabras, de la musica de las palabras, como una de esas cajitas que con un sistema de organillo, producen notas que se unen al ritmo de que gira la manivela.
Hay una muy pequeñita que toca "Love story".
Una vez quise regalartela.
Precisamente, esos dias no estabas.
Cada dia se venia conmigo.
Era casi un rito que cada noche cogiera la carretera de regreso.
Eran, esos dias de febrero donde el invierno parece dormido por que la primavera ha llegado.
Asi se hallaba mi alma.
Un alma cargada de espera y de esperanza, del que nada espera y es esa su esperanza, pues en ello, cada instante se vuelve en una extrema alegria de cosas que hasta que te conoci, no me hubiera detenido.
Por eso, de algun modo, el mundo que he creado ante ti, ese que se desmorona cada vez que te veo, pues al ser tan hermosa, escondo, esta esperando que muevas esa manivela para que el sonido se extienda como los caballos del viento.
Y, esto es asi, yo soy tiempo, tu eternidad.
...no le busques sentido, no lo tiene.
maestro zen.
martes, 4 de marzo de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario